Aislamiento preventivo.

Las Autoridades han dado la orden de cerrar todos los accesos existentes que conducen al Centro. Declararon que los índices de riesgo se han disparado y han llegado a la conclusión de que la mejor forma de Cuidar podía ser a través de una verdadera cuarentena, por tiempo indefinido.

Los Puentes de los alrededores han sido tomados por manifestantes encapuchados que exigen Justicia. Su intención no es molestar, ni que el paso signifique un problema, aunque así termine siendo; sino hacer visible que no recibieron un buen trato e intentar negociar con quienes tienen el poder para llegar a algún acuerdo que les sea beneficioso. Se les ha ocurrido que cortar el paso en los Puentes podía llegar a ser la solución: ellos son los que conectan, cuando las distancias son demasiado extensas o la misma naturaleza no permite un tránsito fluido de un lugar a otro. La posibilidad de que alguien que esté lejos cruce los Puentes intentando llegar al Centro, había sido eliminada por completo. 

Las Autoridades parecieran festejar este acontecimiento.

Sin embargo, un solo camino había quedado liberado, un camino perdido en el medio de la nada que había pasado desapercibido a la vista de todos y que en caso de Emergencia, era posible tomarlo y llegar hasta el Centro, sin dificultades. Pues imagínese, el aislamiento completo podría traducirse en vacío, para luego convertirse en muerte; creo que usted y yo podríamos estar de acuerdo en que la soledad, cuando es forzada, muchas veces resulta ser contraproducente.

Aún así, días atrás, ha llegado la noticia de que ese camino ha sido obstaculizado completamente por un suceso que escapa a la orden de cualquier autoridad o al poder de cualquier manifestante organizado: se ha producido un derrumbe que lo ha colmado de grandísimas rocas, generando así que finalmente no exista ninguna posibilidad de paso.

Y ahora sí: mi Corazón pareciera haber quedado totalmente blindado.

Pero recuerde usted que no es éste un acto de mero capricho. Sino que todas estas medidas de aislamiento son preventivas, y tienen un fin en verdad: cuidar, y si hay heridas, sanar.